17.12.09
SALVADA POR UN EXPERTO
Paula, otra vez llegaba tarde a casa , como la mayoría de los días que había que hacer inventario. Era una noche oscura y fría, de esas que hacen volar a la imaginación y aligerar las piernas para meter la llave en la cerradura cuanto antes. Por fin apareció, al final de la calle, el contorno de su vivienda, que hoy le parecía que estaba más lejos que nunca.
Todavía tuvo que revolver un rato en el bolso antes de encontrar las “malditas llaves” y.... HOGAR DULCE HOGAR.
-¡Qué oscuro está esto!,
clic, clic, clic
No me lo puedo creer.
Clicclicclicclic.....
¡No hay luz!
Después de revolver todos los cajones del salón y la cocina para ver si encontraba una linterna, se acordó de que le habían sobrado algunas velas de la última cena romántica que preparó. - Para lo que sirvió...puf... imbécil.
Con la vela encendida se sintió mejor:- ¿y ahora qué?
Había subido y bajado todos los diferenciales, desconectado todos los aparatos... Nada.
El ordenador, quizá tenga carga la batería. ¡Bingo!
Electricistas expertos y rápidos. ¡Estos!. Después de hablar con el técnico y asegurarle que no tardaría más de media hora, decidió consultar la prensa virtual para entretenerse.
Pasados unos minutos, en el piso de arriba, se oyó un fuerte golpe y varios pasos apresurados. A Paula se le heló la sangre en las venas. Paralizada frente al ordenador, con las pupilas casi fuera de sus órbitas no era capaz de entender nada de lo que leía.
-¿Quien anda ahí?
A la luz de las velas su sombra bailoteaba gigante por la habitación.
-¡Aaaaaaaaaaaah!
Nunca habría creído en la agilidad de la que eran capaces sus piernas para saltar, llevarse por delante, caer, revolcarse e incorporarse en menos de 3 segundos que tardó en cruzar el salón lleno de obstáculos, plantarse en la calle y abrazarse al hombre que en ese momento llamaba a su puerta.
Soy el electricista, señora y estoy casado.
En el quicio de la puerta un precioso gato negro observaba ajeno la escena, después de un instante, desapareció en la oscura y fría noche.
Expertos Electricistas es una empresa dinámica y en continua formación que ofrece a precio ajustado
Un servicio rápido y eficaz en reparaciones de averías a cualquier hora
Realización de boletines y proyectos necesarios para las nuevas instalaciones
Instalaciones eléctricas nuevas y actualización de las antiguas incluida la legalización y trámites con la compañía eléctrica. Servicio llave en mano.
Mantenimiento eléctrico en Comunidades de vecinos, comercios, industrias etc..
Todos sus servicios son supervisados y dirigidos por el instalador autorizado Javier Marugán, experto electricista con más de 15 años de experiencia profesional, que pone todo su esfuerzo en conseguir un trabajo bien hecho.
Todos sus presupuestos, gratuitos y sin compromiso, son ajustados en precio al máximo, especificando claramente, materiales, mano de obra, trámites, boletines si fueren necesarios etc.. y tiempo de realización.
Garantizan 100% Transparencia y Eficacia.
En manos de un experto, la obra más complicada, tiene fácil solución.
Su página web: www.expertoselectricistas.com
Por P. Grau
1.12.09
EN PLENA CRISIS... MADRID SE DIVIERTE
Sábado noche, frío de muerte y la Gran Vía a reventar de gente.
La Plaza de España es un gran botellón donde los más jóvenes ahogan sus tensiones en alcohol.
Es tal el chorro de gente que sube y baja por la Gran Vía, que no hay más remedio que dejarse llevar, sin pararse, hasta la desembocadura de la Plaza de CALLAO.
En Callao, bajo un imponente árbol de navidad como testigo, numerosos niños, padres y curiosos se agolpan alrededor de la pista de patinaje. Cuesta un triunfo atravesar la Plaza para dirigirse a la Calle Preciados.
A medida que avanzamos por un Preciados coronado con grandes rosetones luminosos, apreciamos al fondo la gran aglomeración humana de la Puerta del Sol, diáfana, para albergar a tanta gente y adornada con un enorme árbol multicolor que nos observa desde el cielo.
Llegando a la Plaza Mayor ya se aprecia el olor a calamares, ¡la cantidad de bocatas que se comerá Madrid en una noche como ésta!
Bajando por la calle Toledo hacia “Las Cavas”, en la Calle Puerta Cerrada nº 7, se encuentra “El Madroño”, Taberna de sabrosas tapas en el corazón del Madrid más castizo. El local, decorado en azulejos con motivos madrileños, invita a la degustación de sus tapas a ritmo de chotis, regadas con gran variedad de vinos. Bajo la atenta mirada de un Baco triunfante del cuadro “Los Borrachos” de Velázquez, representado en sus azulejos, se puede saborear el rico licor del madroño servido en unos curiosos vasitos de barquillo y chocolate.
Las especialidades de su carta, como los huevos de mi corral de Zamora con jamón, la cecina con almendras, la ensalada de pimientos con ventresca, el queso cremoso, o el rabo de toro, hacen las delicias de los que se adentran en su concurrido local, a un precio razonable.
Las 12 de la noche y en la calle no se agota el río de gente.
En el Mercado de San Miguel siguen corriendo el vino, la cerveza y las tapas en un agradable ambiente para todas las edades.
No hay duda de que Madrid, el sábado, sale de marcha llueva o truene.
La Plaza de España es un gran botellón donde los más jóvenes ahogan sus tensiones en alcohol.
Es tal el chorro de gente que sube y baja por la Gran Vía, que no hay más remedio que dejarse llevar, sin pararse, hasta la desembocadura de la Plaza de CALLAO.
En Callao, bajo un imponente árbol de navidad como testigo, numerosos niños, padres y curiosos se agolpan alrededor de la pista de patinaje. Cuesta un triunfo atravesar la Plaza para dirigirse a la Calle Preciados.
A medida que avanzamos por un Preciados coronado con grandes rosetones luminosos, apreciamos al fondo la gran aglomeración humana de la Puerta del Sol, diáfana, para albergar a tanta gente y adornada con un enorme árbol multicolor que nos observa desde el cielo.
Llegando a la Plaza Mayor ya se aprecia el olor a calamares, ¡la cantidad de bocatas que se comerá Madrid en una noche como ésta!
Bajando por la calle Toledo hacia “Las Cavas”, en la Calle Puerta Cerrada nº 7, se encuentra “El Madroño”, Taberna de sabrosas tapas en el corazón del Madrid más castizo. El local, decorado en azulejos con motivos madrileños, invita a la degustación de sus tapas a ritmo de chotis, regadas con gran variedad de vinos. Bajo la atenta mirada de un Baco triunfante del cuadro “Los Borrachos” de Velázquez, representado en sus azulejos, se puede saborear el rico licor del madroño servido en unos curiosos vasitos de barquillo y chocolate.
Las especialidades de su carta, como los huevos de mi corral de Zamora con jamón, la cecina con almendras, la ensalada de pimientos con ventresca, el queso cremoso, o el rabo de toro, hacen las delicias de los que se adentran en su concurrido local, a un precio razonable.
Las 12 de la noche y en la calle no se agota el río de gente.
En el Mercado de San Miguel siguen corriendo el vino, la cerveza y las tapas en un agradable ambiente para todas las edades.
No hay duda de que Madrid, el sábado, sale de marcha llueva o truene.
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